El universo de agua que tuerce su cuerpo en escala con las estrellas



martes, 22 de junio de 2010

A veces pienso en escapar



Son muchas las calles, muchos los caminos y muchas las voces que me hablan todo el tiempo. A veces pienso en detenerlo aunque sea sólamente por un momento. Lo intento. Lo intento y me rindo la mayoría de las veces. Todo va a un ritmo que escapa a mis sentidos. También escapa a mis sensaciones. Escapa a mí.

De repente yo en medio de todo, pero no por mucho tiempo. Y cuando quiero simplemente recordar lo que acaba de pasar me veo obligada a dar un paso hacia adelante. ¿Por qué me empujás? ¿No ves que no quiero seguir? Y la respuesta siempre es "ya pasó, dejalo ir"; ¿Por qué pasó? ¿Por qué hiciste que pasara? Y para esas preguntas ya no encuentro respuestas.
Es entonces, que le deseo de guardar ciertas cosas en mí y que no me dejen se convierte en lo único; lo único que quiero al despertar cada dia. No es muy dificil, sólo quiero que el día que viene, el otro y el otro otro pueda cerrar los ojos y vengan a mis recuerdos esos lindos momentos, esos abrazos que nunca debieron acabar, esas sonrisas cómplices, esas palabras de aliento de todas esas personas que, definitivamente, no tendrían que irse nunca. Entre sueños, inmediatamente algo corre esa hoja de mi vida y, simplemente, se va.
Cada vez es mas difícil lograr que se queden conmigo y ,al despertar, si no recuerdo algo me rindo. Cierro los ojos, me entierro en mi misma y espero poder irme yo ahora. Irme a ningun otro lugar que a mi mundo de sueños; intentando escapar del insaciable tiempo vertiginoso que quiere llevarse todo y dejarme acá.

sábado, 12 de junio de 2010

Las preguntas no tienen final


Vas por la calle sin direccion ni sentido, quizás andás solo sin motivo. Todo lo que está a tu alcance parece táctil, es visiblemente real y es más; lo podés comprobar. Sin embargo te detenés en todo aquello que no lográs percibir totalmente. Te frena lo aparentemente inalcanzable, lo complejo, lo que escapa a tus esquemas, lo que no podés explicar con ese librito que te vendieron ayer.
De repente mil preguntas encontrás en tu mente. Te preguntás todo de todos y quizás es tan simple como que no ves más allá. O quizás es que mirás por demás.
Sabés? hay preguntas que nunca vas a poder contestar y simplemente es que no tienen respuesta. Es como si le preguntaras a la mariposa por qué vuela con tanta energía si ya sabe su final. Naturalmente no te va a contestar, porque no puede lógicamente. Pero, aunque pudiera, no lo haría. No. Estoy segura de que no te contestaría, porque quizás su andar te está diciendo mucho más que todas las palabras del mundo.
No busques entender todo lo que se te cruza. Quizás dándole paso a la imaginación se alivia un poco más la desilución que el no tener respuestas a cambio de las preguntas provoca.

miércoles, 9 de junio de 2010

Ayer todo era azul



Un día más, un mes diferente, otra estación y una canción que ya no se escucha más. No importa ya dónde estuviste ayer ni dónde el día anterior, hoy estás en hoy y punto. Con el tiempo te olvidás de lo que querías para éste hoy y los sueños que tu mente creaba cada vez te son más extraños, y ahora los llamás "tonterías" que pensabas cuando eras "chiquito". ¿Qué tan grande sos ahora? ¿Qué cambió en vos para que te olvidaras de todo lo que en algún momento te alimentaba?
Ayer era todo azul, te dormías a las nueve y media y te despertabas a las siete, ocho o nueve de la mañana todos los días. Hoy no importa cuánto dormís ni dónde ni cuándo, sólo importa que mañana te espera un día tal cual al que pasó. Entonces te rendís, conformándote con que no podés hacer nada para cambiar esa realidad que se planta delante tuyo como si fuera un gigante indominable.